Su nombre real es Ambrosio
No tenemos imagenes reales de el, puesto que cada vez que le van a sacar una foto arroja sus heces sobre la cámara.

Ambrosio era hijo de una señora gorda de tordesillas y un viejo repugnante, al que todos tiraban piedras.
A mi me hubiera gustado ver el polvo... ¿A vosotros no? ¿Ah, no? Vale, vale...

Vivió una infancia muy profunda. Profunda en el sentido de que a menudo le arrojaban a un pozo de muchos metros de profundidad, por si se moría.
Pero siempre se escapaba el jodío.




Le pozo

Su adolescencia iba mucho más de puta madre. Tuvo una novia, con la que lo pasó muy bien. Era una piedra, y le enseño a amar, y tal. Hasta que le dejó por un guijarro de río. ¡La muy puta!

Suerte que después encontró más novias piedra, con las que tuvo una gran experiencia emocional.




Como se puede apreciar en las piedras, el tío es un pichabrava.
No lo entenderás si no eres un degenerado.


Actualmente se dedica a soomizar animales de granja, escribir guiones de anuncios de perfumes y hacer fotos a viejas asquerosas para llevarlas a ese rincón de su casa en el que todo está lleno de un líquido no alcohólico que no es agua